A Sexual Odyssey
Autor: Lynn Paula Russell
Año: 2000
Editorial: The Erotic Print Society
Idi: ING
Lynn Paula Rusell empezó
dibujando de jovencita, nacida en Whitstable (Reino Unido) en 1949, estudió artes
bellas y dramática en el Canterbury
College of Art y la Royal Academy of Dramatic Art. Todo un encanto de chica que empezó ilustrando libros infantiles
y protagonizando anuncios de lencería televisiva mientras papeleaba en pequeños
teatros.
En 1980 fue invitada al
Royal Court Theathe para hablar con el elenco de actores que ensayaban una obra
sobre mujeres y pornografía. Como ya había hecho una o dos películas eróticas,
el director pensó que podría darles a los actores una idea de cómo era
realmente trabajar en la industria. En la obra que representaban se mostraba un
drama oscuro sobre la espantosa explotación de unas mujeres obligadas a participar en la pornografía y
tratadas como trozos de carne.
Aquello la desconcertó, ya
que su experiencia sobre actuar sexualmente en un teatro no era aquella obra que
representaban, de hecho hasta cierto punto mostrar su cuerpo desnudo en
actitudes lascivas a viejos voyeurs ejercía sobre ella como persona un efecto
catártico que la liberaba de viejos tabúes y la empoderaba como mujer.
Fue así como la libido resultó ser un buen ungüento que marco
su camino artístico. Decidida y sin vergüenza sus papeles se animaron afirmando
un erotismo autónomo que le fluía natural. Sus dibujos evolucionaron hacia temas
fetichistas como azotes y ataduras, además de representar el cuerpo femenino de
realista a paisajes corporales donde la forma femenina se mimetizaba con la
naturaleza circundante.
Mientras, adoptó el
pseudónimo de Paula Meadows y lanzó su
carrera como actriz hacia espacios más adultos donde explotó en todo su esplendor,
iniciando su carrera como estrella del porno donde rodaría películas icónicas
como Lady Lust (1984) y Flasher (1986).
A principios de los 90 cerró
sus piernas y abrió un nuevo capítulo en su vida cuando comenzó a crear tiras cómicas
para publicar en Francia: ‘Tener total libertad para trabajar como deseaba era
un raro privilegio y era como combinar mis dos amores, el teatro y el arte, en
una sola forma. Cuando buscas formas de contar una historia, te sientes un poco
como un director de cine, pero sin la necesidad de un presupuesto enorme. Me
encantó este trabajo’.
Hasta llegar a esta Odisea
Sexual donde se resuelve arte y escritos de Lynn exponiendo sus eróticos
paisajes, el diccionario del dolor, castigo y azote, hasta culminar con su
cómic más cósmico y explícito de puro sexo.
Sin duda la autora asume sus
pecados de juventud y reconoce su fascinación por la Historia de O y otros
libros eróticos que se trasladan a sus imágenes vivas y calientes en busca de
una pornografía intelectual, donde los lobos hambrientos de ojos brillantes que
un día rodearon su cordura reconozcan por fin su energía creativa.
Paula, ¿puedes explicarnos
la diferencia entre arte erótico y pornografía?
‘Esta es la pregunta que
siempre me hacen y tan difícil de responder, porque no es fácil comparar dos
conceptos que significan cosas distintas para diferentes personas. Incluso
definir la palabra arte es parte del arte en cuestión, seguramente mejor
palabra que sucia en la fotografía de mis sexos abiertos’.
Enlace
Painful Pleasures
A Sexual Odyssey
The Janus Collection
The Scarlet Library
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